Parece evidente que con la digitalización empresarial los servicios tecnológicos se han convertido en un recurso imprescindible. Sin embargo, incluso a pesar de utilizarlos a diario, no siempre tenemos claro en qué consisten exactamente este tipo de servicios. De hecho, se trata de herramientas a las que recurrimos de manera prácticamente constante, tanto en entornos domésticos como a nivel profesional.
La prestación de las tecnologías de la información como servicio lleva años instaurada en organizaciones de todo tipo, si bien es cierto que su continua evolución ha permitido la implementación de nuevas opciones dirigidas a la gestión, a la seguridad, a la productividad e, incluso, al marketing y las ventas. Profundicemos en los servicios tecnológicos y sus tipologías.
¿En qué consisten los servicios tecnológicos?
Los servicios tecnológicos son todos aquellos que se ofrecen desde empresas proveedoras a nivel doméstico y profesional, de modo que se facilitan las tareas de los usuarios en todo tipo de entornos. Hablamos desde las herramientas tecnológicas hasta las aplicaciones, programas y softwares de todo tipo que permiten realizar tareas de gestión, producción, almacenamiento e interacción a través de la información y los datos.
En este sentido, también debemos incluir las propias redes de telecomunicación -tanto las telefónicas como las inalámbricas que sustentan la conectividad WiFi, 4G o 5G-, así como la combinación de todos estos elementos con el fin de prestar servicios tecnológicos a clientes de todo tipo.
¿Qué tipos de servicios tecnológicos existen?
Hasta ahora tenemos un concepto claro del significado de servicios tecnológicos, pero proyectado desde un punto de vista algo abstracto. Para concretar y clarificar el término es importante entender qué tipologías conforman estos servicios, ya que se pueden prestar a través de múltiples opciones, desde el propio hardware hasta softwares en modo SaaS, IaaS o PaaS.
Hardware
Hasta hace no tanto tiempo parecía complejo incluir el hardware dentro de los servicios tecnológicos, ya que tradicionalmente se ha tratado más bien de un producto. Sin embargo, el uso común de las redes o el alquiler de equipos, además de las empresas que se encargan de la instalación y el mantenimiento de equipos propios como proveedores, han convertido este aspecto en un servicio más dentro de las TI.
Software
Por otra parte nos encontramos con las aplicaciones genéricas que se ofrecen para su instalación en los equipos de las empresas -o en los de uso doméstico-. En este caso nos referimos a la venta de servicios de actualización y mantenimiento sobre un software que se ofrece en el mercado.
Pueden comercializarse a través de pago único o mediante suscripciones mensuales o anuales -incluso mediante diversos planes, que en algún caso ofrecen servicios básicos de forma gratuita-.
SaaS
Cuando hablamos de SaaS -software como servicio-, nos referimos a comercializar un software como servicio, aunque no es exactamente lo mismo que el caso anterior. Aquí nos referimos también a la inclusión de servidores donde se alojan las propias aplicaciones, que además suelen unificar todas las herramientas de gestión o de producción de una misma empresa.
IaaS
La IaaS -infraestructura como servicio- ofrece únicamente los aspectos físicos del SaaS, es decir, el hardware necesario para gestionar las TI de forma externalizada mediante servidores y otros elementos tecnológicos. Cuando contratamos una infraestructura como servicio, el proveedor es quien se encarga prácticamente de todo, desde ofrecer el acceso a la red y los servidores hasta la gestión de los recursos, pasando por el almacenamiento.
PaaS
Finalmente, las PaaS -plataformas como servicio-, ofrecen un compendio de las dos opciones anteriores, lo que permite al cliente despreocuparse por completo de los aspectos externos de sus hardware y software, como las actualizaciones, el mantenimiento o la seguridad, entre otros. Se trata de la posibilidad más completa dentro de los servicios tecnológicos.
Las tecnologías de la información como servicio para las empresas
Como ves, cuando hablamos de prestar servicios tecnológicos, la tecnología de la información acapara todo el protagonismo. Hablamos de una materia absolutamente esencial en la digitalización de los negocios actualmente, sobre la cual se sustentan todos los datos de las empresas informatizadas, así como su gestión, el envío y la interacción con los mismos. Encontrar un buen proveedor para el suministro de este tipo de servicios resulta fundamental.
¿Por qué recurrir a los servicios tecnológicos en la digitalización de un negocio?
Recurrir a los servicios tecnológicos a día de hoy en una organización supone una gran inversión, pero al mismo tiempo deriva en un ahorro de costes a la hora de digitalizar el negocio.
Adquirir servicios por parte de proveedores resulta infinitamente más económico que comprar un software completo o algunos hardwares de gran envergadura, como los data centers y todos los elementos que requiere para su funcionamiento, además de todo el espacio físico que puedan llegar a ocupar.
No hay comentarios
Déjanos tu comentario